MI MADRE, MI MEJOR AMIGA
Dos
amigos se encontraban tomando un café, y uno le comenta en tono
de queja al otro:
*
Mi mamá me llama mucho por teléfono a la oficina y solo para
pedirme que vaya a conversar con ella, siempre la misma
quejadera, que "se siente sola"; la verdad yo voy poco y en
ocasiones siento que me molesta su forma de ser. Ya sabes como
son los viejos: Cuentan las mismas cosas una y otra vez y sin
mencionar de los achaques que estrena cada día; y bueno, como tu
sabes nunca me faltan los compromisos: Que el trabajo, que
los amigos, la Asociación.. .. En fin sabes como es, No?...
El
otro amigo se queda callado, y luego responde: Yo en cambio,
converso mucho con mi mamá; cada vez que estoy triste, voy con
ella; cuando me siento solo o cuando tengo un problema y
necesito fortaleza, acudo a ella y ella me conforta, me da
fortaleza, y siempre termino sintiéndome mejor.
Caramba - se apenó el otro - Eres mejor que yo.
No
lo creas, soy igual que tu, o al menos lo era - respondió el
amigo con tristeza. En realidad visito a mi mamá en el
cementerio.
Murió hace tiempo, pero mientras estuvo conmigo, tampoco yo iba
a conversar con ella pensaba y sentía lo mismo que tú. Y no
sabes cuanta falta me hace ahora su presencia, cuánto no daría
por sentir las caricias que con tanto amor me prodigaba, y que
rechazaba porque "ya no era un niño"; ó cuánto me pesa no haber
escuchado todos los consejos que me daba, cuando con torpeza le
decía:
"Yo
sé lo que hago", y por ello cometí muchos errores. Ay amigo, si
supieras ahora como la busco, y ahora es mi mejor amiga.
Cuando sentado en la tierra fría del camposanto mirando solo su
foto en el muro gris, en el que le puse "te amo", (palabras que
nunca escuchó de mis labios), le pido que me perdone por haber
sido tan frío, por las veces que le mentí, y por los muchos
besos que no le di, más el silencio me responde y cuando una
brisa acaricia mis mejillas, sé que ella me perdona.
-Mira con ojos empañados a su amigo y luego dice- Discúlpame
este arranque, pero si de algo te sirve mi experiencia, conversa
con ella hoy que la tienes, valora su presencia resaltando sus
virtudes que seguro posee, deja a un lado sus errores, que de
una u otra forman parte de su ser. No esperes a que esté en un
cementerio porque ahí la reflexión duele hasta el fondo del
alma, porque entiendes que ya nunca podrás hacer lo que dejaste
pendiente, será un hueco que nunca podrás llenar. No permitas
que te pase lo que me pasó a mí.
En
el camino, iba pensando en las palabras de su amigo. Cuando
llegó a la oficina, dijo a su secretaria: Comuníqueme por favor
con mi madre, no me pase mas llamadas y también modifique mi
agenda porque este día lo dedicaré a ella!.
¡¡No dejes pasar este día sin decir "te amo".
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